IMPACTO DE LA INTELIGENCIA ARTIFICIAL EN
LA TRANSFORMACIÓN DE LA EDUCACIÓN
SUPERIOR
IMPACT OF ARTIFICIAL INTELLIGENCE ON THE
TRANSFORMATION OF HIGHER EDUCATION
Aldo Rubén Ayala Ala
Universidad Pública de El Alto
pág. 7219
DOI: https://doi.org/10.37811/cl_rcm.v8i2.11126
Impacto de la Inteligencia Artificial en la transformación de la Educación
Superior
Aldo Rubén Ayala Ala
1
aldoayala373@gmail.com
https://orcid.org/0009-0001-3435-2771
Universidad Pública de El Alto
Bolivia
RESUMEN
El presente artículo se centra en analizar el impacto de la IA en la educación superior y su amplio
potencial para elevar la calidad del proceso educativo. Se abordó un enfoque de investigación
cualitativo, un diseño no experimental y una metodología descriptiva. El alcance de la investigación
abarcó desde la revisión de fuentes documentales hasta la observación directa. Se llevaron a cabo
búsquedas en bases de datos como Web of Science, Scopus, Google Scholar y Research4life,
considerando artículos entre 2019 y 2023. Como resultado, se evidenció que la IA puede ser empleada
eficazmente para potenciar la personalización del aprendizaje, el respaldo al profesorado, la evaluación,
la retención estudiantil y la toma de decisiones en la gestión académica institucional. En conclusión, la
introducción de la IA en la educación superior presenta oportunidades significativas para mejorar el
proceso de enseñanza-aprendizaje. A pesar de estos beneficios, la implementación de la IA enfrenta retos
críticos, como el resguardo de la privacidad de datos, la equidad en el acceso tecnológico y la necesidad
de una capacitación en el tema de ética digital. Abordar de manera efectiva estos desafíos es esencial
para asegurar una integración responsable y beneficiosa de la IA en la educación.
Palabras clave: educación, inteligencia artificial y aprendizaje
1
Autor principal.
Correspondencia: aldoayala373@gmail.com
pág. 7220
Impact of Artificial Intelligence on the Transformation of Higher Education
ABSTRACT
This article focuses on analyzing the impact of AI on higher education and its broad potential to enhance
the quality of the educational process. A qualitative research approach, a non-experimental design, and
a descriptive methodology were employed. The scope of the research ranged from the review of
documentary sources to direct observation. Searches were conducted in databases such as Web of
Science, Scopus, Google Scholar, and Research4life, considering articles published between 2019 and
2023. As a result, it was evidenced that AI can be effectively used to enhance personalized learning,
support faculty, assessment, student retention, and decision-making in institutional academic
management. In conclusion, the introduction of AI in higher education presents significant opportunities
to improve the teaching-learning process. Despite these benefits, the implementation of AI faces critical
challenges, such as safeguarding data privacy, equity in technological access, and the need for training
in digital ethics. Effectively addressing these challenges is essential to ensure a responsible and
beneficial integration of AI in education.
Keywords: education, artificial intelligence and learning
Artículo recibido 25 marzo 2024
Aceptado para publicación: 15 abril 2024
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INTRODUCCIÓN
La educación superior experimenta cambios continuos, y la tecnología desempeña un papel cada vez
más decisivo en los métodos de aprendizaje y enseñanza. En este contexto, la Inteligencia Artificial (IA)
surge como una tecnología emergente de gran potencial que está transformando diversas industrias, entre
ellas la educación (Lee & Lee, 2020). De esta manera, en el ámbito de la educación superior, la IA tiene
el potencial de mejorar la personalización del aprendizaje, brindar apoyo al profesorado, facilitar la
evaluación, aumentar la retención estudiantil y contribuir a la toma de decisiones en la gestión académica
(Sánchez & García, 2020).
No obstante, la introducción de la Inteligencia Artificial (IA) en la práctica educativa superior presenta
diversos desafíos significativos, como la equidad en el acceso a la tecnología, la protección de la
privacidad de los datos y la necesidad de proporcionar una formación adecuada tanto a estudiantes como
a profesores (Vargas & Tang, 2019). Además, la IA plantea interrogantes fundamentales acerca del papel
de los profesores y el papel de la tecnología en el ámbito de la educación superior.
En este marco, la IA se define como la emulación o simulación de procesos de inteligencia humana
llevada a cabo por máquinas, comúnmente sistemas informáticos (Chen & Liu, 2020). De esta manera,
la IA se refiere a la capacidad de máquinas, modelos o sistemas para aprender y llevar a cabo tareas que
normalmente requieren inteligencia humana, como el reconocimiento de patrones, la toma de decisiones
y procesamiento del lenguaje natural (López & Gómez, 2020). Aunque este campo de la informática ha
tenido amplias aplicaciones en áreas como medicina, industria, transporte, banca, entre otros, su
implementación en la educación superior es relativamente reciente y ha suscitado un notable interés en
la comunidad académica debido a su potencial para mejorar de manera significativa la calidad del
aprendizaje y la enseñanza (Fernández, 2023).
Asimismo, los criterios de elección metodológica para la sistematización del presente artículo se
alinearon horizontalmente con los objetivos y la naturaleza del estudio. Dichos criterios incluyeron:
profundidad de comprensión, contextualización, descripción y observación del proceso de enseñanza-
aprendizaje en educación superior. La combinación de estos criterios proporcionó un marco integral
para describir y explorar el impacto de la inteligencia artificial en la educación superior desde diversas
perspectivas y en su contexto auténtico.
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De esta manera, el presente artículo pretende ofrecer una comprensión general de cómo la
implementación de tecnologías basadas en inteligencia artificial impacta en la enseñanza y el
aprendizaje en la educación superior. A través de la observación directa y la revisión de fuentes
documentales, se busca describir los desafíos emergentes y las dinámicas socioeducativas que surgen de
dicha aplicación tecnológica, así como identificar oportunidades para adaptar y mejorar los programas
académicos en el dinámico contexto de la educación superior.
Por consiguiente, la introducción de la IA en la educación superior constituye un tema crucial que ha
sido ampliamente debatido en la literatura académica reciente (Urquilla, 2022). El impacto de esta
inserción tecnológica en la práctica educativa superior promueve cambios significativos en la enseñanza,
el aprendizaje, la gestión educativa y la experiencia del estudiante. Dentro de este contexto, resulta
relevante para las instituciones educativas superiores abordar aspectos relacionados con la adaptación
de programas académicos, la capacitación y actualización docente, la preservación de la calidad
educativa y la ética digital, entre otros aspectos relevantes (Tomalá y otros, 2023).
MÉTODOLOGÍA
Para la elaboración del presente artículo, se adoptó un enfoque de investigación cualitativa, el cual
explora una realidad subjetiva, dinámica y multifacética que se desarrolla en una multiplicidad de
contextos (Hernández, Fernández y Baptista, 2014). Este enfoque de investigación facilitó la
exploración de las experiencias, perspectivas y significados subyacentes relacionados con la integración
de la IA en la educación superior. Posteriormente, en el diseño de la investigación se trató el aspecto no
experimental, definido por Cohen y Gómez (2019) como aquel que no manipula premeditadamente las
variables. Este diseño permitió estudiar el impacto de la IA en situaciones del mundo real sin
manipulación deliberada de variables.
Simultáneamente, en la sistematización teórica, se utilizó la metodología descriptiva, la cual consiste en
evaluar y describir ciertas particularidades de una situación específica en uno o más momentos
cronológicos (Hernández, Fernández y Baptista, 2014). Esta metodología respaldó la elaboración de una
imagen detallada y completa sobre cómo la IA está influyendo en la educación superior, permitiendo
también una presentación clara y detallada de los hallazgos.
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Consecuentemente, para que la investigación sea efectiva, se requieren procedimientos y medios que
implementen el método previamente definido. Por consiguiente, es necesario emplear técnicas que
faciliten el logro de un objetivo o resultado específico. Estas técnicas de investigación constituyen un
conjunto de pasos metodológicos y sistemáticos cuya meta es garantizar la operatividad del desarrollo
investigativo (Hernández, Fernández y Baptista, 2014). Por ende, en la sistematización del presente
artículo, se hizo uso principalmente de la técnica de observación y la revisión de fuentes documentales.
De manera simultánea, en lo que respecta a la recopilación de información, se realizaron búsquedas en
bases de datos académicas como Web of Science, Scopus, Research4life y Google Scholar, utilizando
enunciados puntuales como "inteligencia artificial", "aprendizaje individualizado", "educación superior"
y "asesoramiento inteligente". En este contexto, se consideraron artículos publicados en inglés y español
durante el período comprendido entre 2019 y 2023. Se examinaron los resúmenes de los artículos
identificados y se seleccionaron aquellos que cumplían con los criterios de inclusión para su análisis
completo.
RESULTADOS Y DISCUSIÓN
Observamos, por lo tanto, que la introducción de la inteligencia artificial en la educación superior tiene
la capacidad de mejorar de manera significativa la calidad tanto del proceso de aprendizaje como de la
enseñanza. En este marco, la inteligencia artificial puede aplicarse para personalizar el aprendizaje,
proporcionar tutoría inteligente, llevar a cabo evaluaciones automatizadas, brindar apoyo al cuerpo
docente y gestionar aspectos académicos (Chen & Liu, 2020; Duvallet, Lefebvre y Mercier, 2020; Khan
& Yasmin, 2021; Kizilcec & Halawa, 2021). Así mismo, la incorporación de la inteligencia artificial
también puede contribuir a aumentar la retención estudiantil al identificar a aquellos estudiantes en
riesgo de abandonar sus estudios y ofrecer intervenciones tempranas (Duvallet, Lefebvre y Mercier,
2020).
En este contexto, la inteligencia artificial puede utilizarse para analizar los datos de los estudiantes y
ofrecer recomendaciones personalizadas con el fin de mejorar su rendimiento académico. Esto, junto
con las actuales plataformas de Sistemas de Gestión de Aprendizaje, puede optimizar exponencialmente
la adquisición de conocimientos, liberando así el tiempo docente para dedicarlo a otras facetas
pedagógicas, como la planificación, la tutoría integral, el abordaje de contenidos transversales, las
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adaptaciones curriculares o la personalización del proceso de enseñanza-aprendizaje, entre otras
actividades (Graesser & McNamara, 2020). Simultáneamente, la inteligencia artificial puede
proporcionar apoyo al docente mediante la generación automática de materiales de enseñanza y la
identificación de áreas en las que los estudiantes requieren mayor asistencia (Kluge & Zenk, 2020).
Paralelamente, notamos que la implementación de la IA en la práctica educativa superior destaca por la
interactividad y participación del estudiante en la clase. Los Sistemas de Gestión de Aprendizaje basados
en IA incluyen actualmente aspectos como foros participativos, gamificación, retos gráficos,
simulaciones e interacción digital cooperativa, entre otros, que fomentan la participación activa de los
estudiantes en el proceso de enseñanza-aprendizaje, ya sea de forma anónima, en equipos o de manera
individual (Guacán y otros, 2023). Este aspecto promueve ampliamente el flujo de contenidos, la
resolución de dudas, la reflexión, el análisis, fortalece la escritura académica y fomenta el desarrollo de
habilidades sociales, entre otros beneficios.
Asimismo, la inteligencia artificial puede emplearse en la toma de decisiones en la gestión académica,
identificando patrones en los datos estudiantiles y anticipando posibles problemas futuros (Lindner &
Niederer, 2020). Este aspecto ayudaría a prevenir dificultades de aprendizaje en contenidos posteriores,
así como a potenciar el proceso de aprendizaje de los estudiantes de manera gradual y personalizada, de
acuerdo con su estilo de aprendizaje, método y capacidad individuales. Además, la IA puede, a través
de una programación cronológica académica, indicar al estudiante el momento preciso para el abordaje
de contenidos, teniendo en cuenta aspectos neuropsicopedagógicos.
Sin embargo, se identificaron obstáculos significativos en la integración de la inteligencia artificial en
la educación superior. Uno de los desafíos primordiales radica en la privacidad de los datos, dado que
la IA hace uso de grandes cantidades de información personal de estudiantes, profesores y personal
administrativo (Jin et al., 2021). Otro desafío crucial es la equidad en el acceso a la tecnología, ya que
la implementación de la IA requiere que todos los estudiantes cuenten con un acceso adecuado a la
tecnología (Duvallet, Lefebvre y Mercier, 2020).
Por otro lado, la integración de la IA en la práctica educativa superior podría revelar tensiones en la
implementación de políticas institucionales y en la actualización de infraestructuras para dar soporte a
dicha tecnología y todo lo que eso conlleva (Tomalá y otros, 2023). De esta manera, las instituciones
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superiores podrían enfrentar obstáculos pecuniarios relacionados con la actualización y capacitación de
docentes, la adquisición de Sistemas de Gestión de Aprendizaje basados en IA, suscripciones a
plataformas y software educativo, así como la adquisición de dispositivos electrónicos compatibles con
Inteligencia Artificial (IA).
Consecuentemente, la implementación de la IA suscita interrogantes significativas acerca del rol de los
profesores y del papel de la tecnología en los procesos de aprendizaje y enseñanza (Khan & Yasmin,
2021). A medida que la IA se incorpora en los procesos de enseñanza y aprendizaje, es imperativo
garantizar el respeto de los derechos de los estudiantes y los principios éticos (Tomalá y otros, 2023).
En este contexto, los educadores deben ser conscientes de las repercusiones éticas del uso de la IA en el
aula y asegurarse de que se utilice de forma responsable. Además, es fundamental proporcionar
capacitación sobre ética digital tanto a los profesores como a los estudiantes, así como establecer
normativas y reglamentos institucionales para la utilización idónea de la IA en la educación.
Seguidamente, como discusión afirmamos que la inclusión de la inteligencia artificial en la educación
superior ha estimulado un valioso interés en la comunidad académica a nivel mundial debido a su
capacidad potencial para optimizar la calidad de la enseñanza y el aprendizaje (Tomalá y otros, 2023).
De acuerdo con la revisión bibliográfica, se evidencia que la IA puede transformar en esencia la dinámica
educativa al facilitar soluciones adaptadas y novedosas tanto para estudiantes como para los profesores.
Desde la adecuación del aprendizaje hasta la orientación inteligente educacional, la IA está desplegando
nuevos senderos en la forma en que se percibe y se implementa la enseñanza en los diferentes niveles
educativos. Conjuntamente, la capacidad de la IA para mecanizar la evaluación y ofrecer
retroalimentación rápida podría transformar absolutamente la manera en que se valora el progreso de
los estudiantes y se adapta la enseñanza para satisfacer sus necesidades académicas individuales
(Fernández, 2023; Urquilla, 2022).
Además, la incorporación de la IA puede contribuir de manera preponderante a mejorar la retención
estudiantil al identificar de manera prematura a aquellos estudiantes en riesgo de deponer sus estudios
y brindar mediaciones personalizadas para abordar estos desafíos específicos. Este enfoque provisorio
no solo beneficiaría a los estudiantes al proporcionarles el respaldo necesario para conseguir el éxito
académico, sino que también permitiría a las instituciones educativas superiores optimizar sus recursos
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y gestionar estrategias de retención (Tomalá y otros, 2023). En colofón, la integración de la IA en la
educación superior simboliza un avance significativo que promete transformar la experiencia educativa
y mejorar ampliamente los logros de aprendizaje.
La introducción de la inteligencia artificial en la educación superior plantea cuestionamientos
fundamentales sobre la función de los profesores y el impacto de la tecnología en la práctica educativa.
En este marco, es vital explorar cómo la IA puede hermanar la labor del profesorado en el aula y ser
utilizada de manera efectiva para optimizar el aprendizaje de los estudiantes. Esto involucra considerar
cómo la IA puede perfeccionar la entrega de contenido, ofrecer retroalimentación individualizada y
adaptar la enseñanza a las necesidades propias de cada estudiante. Asimismo, es fundamental analizar
cómo la IA puede ayudar a los profesores a administrar el tiempo en clase de forma más eficaz,
permitiéndoles concentrarse en actividades de mayor valor, como la asesoría individualizada y la
organización de debates en el aula, entre tantos otros.
Por otra parte, es imprescindible abordar la cuestión ética en la utilización de la IA en la educación
superior. En este marco, se requiere establecer normativas claras y éticas sobre la recolección, la
utilización y la protección de los datos de los estudiantes, así como sobre la transparencia en el
funcionamiento de los diferentes algoritmos de IA empleados en la práctica educativa. Además, es
crucial garantizar que la IA se emplee de manera equitativa e inclusiva, asegurando que todos los
estudiantes posean acceso igualitario a las oportunidades educativas ofrecidas por dicha tecnología y
todo lo que ello conlleva. En síntesis, abordar estos aspectos éticos es esencial para asegurar que la
implementación de la IA en la educación superior sea responsable y beneficiosa para todos los actores
educativos.
Los autores Fernández (2023), Urquilla (2022), Tomalá y otros (2023), así como Guacán y otros (2023),
coinciden en que la integración de la inteligencia artificial en la educación representa una oportunidad
invaluable tanto para el docente como para el estudiante. Destacan que la IA puede optimizar
significativamente la calidad educativa, ofreciendo soluciones innovadoras y personalizadas que se
adaptan a las necesidades académicas de cada estudiante. En el contexto de la educación superior,
señalan que la IA puede desempeñar un papel fundamental en la formación de profesionales altamente
competentes, dotados de habilidades digitales acordes a los desafíos y demandas de la era digital. En
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este sentido, la IA no solo ofrece modernas herramientas y metodologías para la enseñanza-aprendizaje,
sino que también promueve un enfoque más dinámico y direccionado en el estudiante, disponiéndolos
para encarar los desafíos de la sociedad actual.
Desde una perspectiva teórica, el presente artículo amplía la comprensión de la relación entre la
inteligencia artificial y la educación superior. Estos aportes conceptuales fortalecerán el fundamento
teórico necesario para comprender cómo la inteligencia artificial impacta en la educación superior y sus
implicaciones en la gestión institucional y la formación académica. Por otro lado, en términos prácticos,
los hallazgos tienen la capacidad de influir en la toma de decisiones y en la elaboración de normativas
en las instituciones educativas, ofreciendo recomendaciones concretas para abordar desafíos como la
infraestructura tecnológica propia para IA, la formación y capacitación docente, y la equidad en el
acceso, entre otros. Estas aplicaciones prácticas buscan guiar a las instituciones educativas superiores
hacia una integración segura de la inteligencia artificial, con el objetivo de mejorar la calidad educativa
y optimizar la experiencia de aprendizaje para todos los estudiantes.
CONCLUSIONES
La introducción de la inteligencia artificial (IA) en la educación superior representa una oportunidad
preponderante para mejorar el proceso de enseñanza-aprendizaje. En este marco, la IA ofrece numerosos
beneficios, desde la personalización del aprendizaje hasta el apoyo al profesorado, la evaluación
automatizada y la gestión académica. No obstante, su implementación enfrenta desafíos importantes,
como la equidad en el acceso a la tecnología, la protección de la privacidad de los datos y la capacitación
ética tanto para docentes como para estudiantes. Consecuentemente, es esencial abordar estos retos de
manera efectiva para garantizar que la integración de la IA en la educación superior sea responsable y
beneficiosa para todos los involucrados. De esta manera, la IA tiene el potencial de transformar
radicalmente la educación, pero su éxito dependerá de cómo se aborden estos desafíos prácticos y éticos
en el camino hacia la integración plena y efectiva de esta tecnología en las instituciones educativas.
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